Abiertos y a merced de toda la prensa mejicana entrenó la Selección de Costa Rica en la localidad de Chicago, ciudad que para este jueves pretende albergar 60 mil aficionados en el Estadio Soldier Field.
Sin temor al rival y siendo sincero en su sistema de trabajo, desde el pasado martes, el timonel costarricense puso a prueba el esquema con el que pretende superar a los aztecas, en donde le dio énfasis al sistema ofensivo que ha venido implementando en los últimos encuentros.
“Necesitamos salir a ganar el encuentro, por lo que seguiremos insistiendo en la táctica ofensiva, practicando tiros a marco desde cualquier zona, así como las jugadas planificadas”, aseveró Rodrigo Kenton, quien a su vez comentó que según análisis del grupo de estudio técnico de la FIFA, a nivel mundial la mayoría de partidos se ganan con jugadas a balón parado, por lo que se intensificarán las prácticas en este sistema.
El grupo luce motivado, y de acuerdo con lo expresado por el mismo técnico, ya tiene definida en un 90% su propuesta, por lo que solo quedará pulir algunos detalles, para lo cual aprovechará el reconocimiento de la cancha del Soldier Field que será este miércoles en horas de la tarde.
México y Costa Rica enfrentaron una complicada primera fase donde los rivales supieron complicar el juego, por lo que hay que darles el mérito que merecen selecciones como Canadá, Panamá, El Salvador, Haití y la misma Guadalupe, que se plantaron e hicieron sufrir a los supuestos favoritos.
No obstante, un triunfo el próximo jueves con toda certeza borrará malos momentos y elevará la confianza del ganador, que lo impulsará para intentar sin mayores problemas disputar, tres días después, la gran final de la décima versión de la Copa Oro.
Costa Rica reconocerá la cancha del Soldier Field este miércoles 22 de julio a las 18:15 horas por espacio de 45 minutos. Será la última sesión de cancha antes del juego de la supervivencia en la Copa Oro, un clásico de CONCACAF que luce como el choque más atractivo de las semifinales, un partido que para algunos estadísticos, debió darse en la gran final.