Defensor por insistencia más que por elección, declarado amante del fútbol. Así es el jugador del equipo Sub 17 de Costa Rica Daniel Villegas, quien por ese mismo sentimiento y por buscar el sueño mundialista dejó los estudios.
Belemita de nacimiento pero manudo de corazón, el joven futbolista confesó que su pasión al balompié se lo debe a la familia de su madre, que desde pequeño le inculcó el deseo por jugar.
Amante de la lengua en salsa que cocina su mamá, Daniel dijo extrañar las tardes de verano con sus amigos, cuando podía ir a pescar o simplemente a andar en “bici”.
¿Quién es Daniel Villegas?
Soy una persona callada y quizá un poco tímido, pero cuando de fútbol se 
trata me transformo y me hago escuchar en la cancha.
¿Qué le gusta hacer?
Pasar tiempo con mis amigos, ir al cine, escuchar música, hacer otros deportes, no de manera profesional, sino por recreación.
¿Estudia?
Siempre llevé de la mano el estudio con el fútbol, pero en las últimas semanas tuve que tomar la dura decisión de congelar los estudios para dedicarme por completo a la selección. No puedo negar que me dolió porque tenía el deseo de poder graduarme de quinto este año, pero sin duda alguna el tener la oportunidad de ir al Mundial vale el sacrificio.
¿De dónde nace el amor por el fútbol?
De los papás de mi mamá, porque eran los que jugaban, no llegaron a ser profesionales pero llevaban el fútbol en las venas. Empecé como delantero, pero con el paso de los años me necesitaron como defensa, llegué a la selección y mantuve el puesto. En esto llegué a la conclusión de que mientras me pongan a jugar no me importa en qué posición me coloquen.
¿Seguidor de cuál equipo?
A nivel nacional voy con la Liga Deportiva Alajuelense y a nivel internacional me gusta el Arsenal y Real Madrid.
¿A quien admira?
Como jugador me gusta mucho Mesut Özil, porque cuando tiene el balón es muy inteligente, siempre sabe qué hacer, a quien darle el pase, es rápido para pensar y técnicamente me gusta mucho como juega.
¿El mayor reto en su vida?
El llamado a la selección y jugar el premundial. Porque no es fácil llegar a formar parte de una selección, pero es aún más difícil mantenerse.
¿Con qué sueña?
Todas las noches sueño con quedar en la lista final de convocados, las ansias son grandes de poder cumplir mi sueño mundialista.
