Queremos compartirles 2 historias de las más de 2 mil que podríamos contar de los protagonistas hoy en la Media Maratón La Sele. La de un hombre que sobrevivió a un accidente de niño para ser testimonio de vida, y la de un padre que lo da todo en carretera con y por sus hijas.
Empezamos con Joslyn Bidaurry, quien fue uno de los más aplaudidos al cruzar la meta luego de completar los 5 kilómetros. Empezó a correr hace muy poco, por un amigo que también hace atletismo, y que lo motivó a intentarlo también.
Fue uno de los primeros en llegar en la madrugada, cerca de las 4 de la mañana. Es apenas su tercera carrera y en el atletismo encontró la motivación que buscaba, y que le diera la misma oportunidad a todos
“Tuve un accidente con mi familia a los 2 años de edad. Pegamos en moto contra un camión, y mi padrastro murió, mi mamá iba embarazada de mi hermano, yo iba en el tanque, la moto explotó, y a mí me amputaron el pie”. Las marcas de ese accidente aún se evidencian en la mayor parte de su cuerpo, pero eso no frena a Joslyn.
“Me canso mucho más, por hacerla en muletas, pero después de la carrera me voy a descansar y me recupero rápido. Quiero seguir en esto y mi meta es llegar a completar los 21 kilómetros”, contó ya en la meta.
A través del deporte ha podido realizarse y eso, para él, no tiene precio. “Se siente el apoyo de todos, me veo como un ejemplo, porque en este momento muchos están hundidos en las drogas, viven en la calle, con malos pensamientos, lastimosamente pasan por eso. Gracias a Dios yo no, hoy estoy aquí, feliz y agradecido con la vida”, reseñó Joslyn.
“Todo por mis hijas”
Ricardo Palacios corrió los 21 kilómetros de la Media Maratón la Sele… pero no lo hizo solo. En un coche especial llevó a su lado, de principio a fin, a sus hijas Valentina y Fiorella de 9 y 3 años.
La historia de este ejemplar papá es conmovedora. Su hija mayor, Valeria, era una niña normal hasta que por una agresión sufrió una parálisis cerebral. “Ella no habla, pero todo lo entiende y ama las carreras, no podemos estar pagando todas las competencias que queremos, pero hay personas que nos apoyan mucho, todo por la felicidad de mi gran guerrera”.
A pesar de tener que madrugar tanto, la familia completa se apunta en la aventura con mucha alegría. “A mis hijas les encantan las medallas, ver a la gente alrededor, y no lo hacemos para dar lástima, lo hacemos como motivación; la salud de muchos niños cambiaría si los motiváramos más a disfrutar de cualquier tipo de deporte”.
Como papá, Ricardo sabe de esto. “Cuando mi hija a los 3 años tuvo la parálisis yo la cuidaba tanto que no salíamos del hospital, hasta que yo me dije que no, no voy a desperdiciar su niñez, voy a luchar con ella para que sea una niña feliz, completa, nunca la hemos tratado como una niña enferma, es una super niña y de la mano de su hermanita Fiorela son la gran motivación para nuestras vidas, vemos en ellas que todo es posible si lo intentamos con el corazón”.
Dos historias… dos ejemplos, de que hoy más de 2 mil personas corrieron la Media Maratón La Sele por pasión y amor a la vida.